La modelo española Clara Chía Martí y el exdefensor central Gerard Piqué se encuentran en el ojo de las críticas, luego de la oficialización de su relación amorosa tras el accidentado divorcio del exfutbolista con la cantante colombiana Shakira. Tras la mudanza de su exesposa e hijos a la ciudad de Miami, el exjugador del FC Barcelona decidió emprender un viaje para visitar a sus retoños, pero no sin antes darse un paseo por tierras árabes junto a su actual novia.
El viaje de Piqué y Clara
Luego de pasar numerosas semanas desapercibidos, Gerard Piqué y Clara Chía Martí fueron captados nuevamente por la prensa internacional emprendiendo un rumbo curioso para miles de usuarios en redes sociales. La pareja de moda tomó un avión rumbo a Abu Dabi, capital de Emiratos Árabes Unidos. De acuerdo a medios españoles, el plan del exfutbolista español es visitar los lugares turísticos más conocidos de tierras árabes, para luego ir a ver a sus hijos en la ciudad de Miami.
Dos semanas después de que Shakira cierre su mudanza a tierras norteamericanas, Gerard Piqué se interesó en reencontrarse con sus pequeños hijos Sasha y Milán. Durante el comienzo de la nueva vida de la cantante colombiana en Miami, el popular ‘Geri’ y su novia fueron captados en una sorpresiva escapada romántica, celebrando el cumpleaños número 24 de Clara Chía.
CLARAmente la pasaron bien
Pese a visitar un lugar lejano para festejar el onomástico de su novia, Gerard Piqué es conocido a nivel mundial por su conocido matrimonio fallido con la cantautora latinoamericana Shakira, con quien protagonizó uno de los escándalos más grandes de los últimos años. El exjugador catalán fue reconocido por una de las personas hospedadas en un lujoso hotel de Abu Dabi. De acuerdo a las imágenes, el presidente de la Kings League se encontraba pasando un relajante momento junto a su actual novia en sus días de descanso.
Según la prensa internacional, luego de su viaje a Abu Dabi, Gerard Piqué realizará este miércoles 26 de abril su primera visita a Estados Unidos, con el fin de reencontrarse con sus hijos Milán, de 10 años, y Sasha, de 8.