De acuerdo con lo que reveló Gabriel Calvo, tras la llegada de Genaro Delgado Parker a la administración de Panamericana Televisión, los pagos a algunos actores fueron realmente paupérrimos. Uno de ellos fue el caso del fallecido actor Ricardo Fernández.
Te recomendamos
¿Qué reveló Gabriel Calvo?
Durante su entrevista para el podcast de Carlos Orozco, Gabriel Calvo explicó por qué decidió renunciar a la serie ‘Mil Oficios’, pues al parecer fue luego de la entrada de Genaro Delgado Parker a la administración de Panamericana Televisión.
“No pagaban. Me quité de la serie y me fui a vivir a Estados Unidos. No era justo. Se habían ido los auspicios. La frase de Genaro era: ‘Las deudas viejas no se pagan, las deudas nuevas hay que hacerlas envejecer’. Más me dolió porque había actores más jóvenes que tenían más cara en la serie y les pagaron más. Eso me reventó más, dije: ‘No puedo más’”, resaltó en su entrevista.
Asimismo, Gabriel Calvo reveló que varios de sus colegas también atravesaron una situación difícil, debido a que ya no había una locación oficial para grabar los episodios de ‘Mil Oficios’, luego que los dueños del Coliseo Amauta les retiraran todos los permisos.
Incluso Gabriel Calvo resaltó, que su molestia fue en aumento, cuando dejaron de recibir los pagos mensuales por falta de auspicios, una decisión que al parecer habría sido por orden de Genaro Delgado Parker.
Lo que comentó sobre Ricardo Fernández
Por otro lado, Gabriel Calvo reveló que fue testigo de un incidente en el que Ricardo Fernández y Fernando Farrés, reconocidos humoristas y actores peruanos, estuvieron haciendo fila en Panamericana Televisión para exigir su pago.
En esa misma línea, Gabriel Calvo aseguró que al fallecido actor Ricardo Fernández solo le llegaron a pagar siete soles por su actuación como ‘Fidel Suárez’ en ‘Mil Oficios’:
“Esa escena me pareció terrible. Ricardo Fernández era un tremendo actor, le tenía un cariño inmenso. Lo vi haciendo cola en la escalera porque estaban repartiendo un poco de plata entre los actores. Le dieron siete soles, los tenía en su bolsillo. Jamás olvidaré que se le empezó a caer una lágrima por el ojo, fue terrible para mí. También por eso me fui, dije: ‘No hay forma, me quito’. Fue terrible, triste y doloroso.”