Seguro te ha pasado: estás caminando por la calle, un turista te consulta por una dirección y no tienes ni idea. Igual te da las gracias y sigue su camino. Luego de eso te quedas pensando en lo bueno que hubiera sido estar preparado para ayudarlo. Para que no te vuelva a pasar, aquí cinco cosas que puedes hacer para ser buena onda con los que nos visitan:
1. Recomiéndale buenos sitios para comer. Todos conocemos buenos points de comida marina, criolla o postres. No te guardes el dato.
2. Recomiéndale bares. Con tanta variedad de cerveza artesanal, piqueos, bares temáticos y buena música, no será difíficil asegurarte de que pase un buen rato.
3. Adviértele sobre las zonas peligrosas. Cuéntale sobre las zonas en las que debe tener más cuidado, pero sin asustarlo. Esta ayuda puede evitar que regrese a su país con la impresión equivocada.
4. Cuéntale sobre los precios. Dale una idea sobre cuánto cuestan las cosas y recomiéndale que compre todo en lugares formales. Puedes ayudarlo también dándole las tarifas aproximadas de los micros y los taxis.
5. Cuida tu país. Y lo último, pero no menos importante: puedes ayudarlo cuidando las calles, los monumentos históricos y preocupándote por la limpieza de tu ciudad. Esto incluye conversar con la gente que no tiene la misma actitud.
No olvides tener siempre una gran sonrisa cuando lo hagas. Que cada vez más gente nos visite (y quiera regresar) depende de ti.
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